Metaficción frente a realismo/naturalismo en la literatura española del siglo 21: El cuarto de atrás VS Los pazos de Ulloa.
Dec 21,2015
De acuerdo al Diccionario de la Real Academia Española, “realidad” es “lo que es efectivo o tiene valor práctico, en contraposición con lo fantástico e ilusorio”; y por el otro lado define la “ficción” como “la acción de inventar y recrear personajes imaginarios tal como se hace en las obras literarias. Por lo tanto, considerando estos conceptos como punto clave, el propósito de este trabajo es analizar, comparar y contrastar componentes de la metaficción y el realismo/naturalismo en dos obras literarias de la literatura española del siglo XXI; El cuarto de atrás de Carmen Martín Gaite y Los pazos de Ulloa de Pardo Bazán puesto que estos dos conceptos continuamente se interpenetran ya que no representan dos entidades enfrentadas claramente delimitadas sino que por el contrario se suelen confundir.
Al comparar dos elementos se pueden consideras entre muchas dos cosas esenciales, buscar comparar los elementos en juego tratando de encontrar las similitudes que estos poseen o bien, intentar contrastarlos encontrando y enfatizando en los detalles que hacen diferentes a éstas dos partes una de la otra. Por lo tanto, al comparar dos entes puede hacerse con dos finalidades, asemejar a las dos entidades o bien analizarlos a sus características. Sin embargo, el contrastar dos conceptos de manera paralela habla de dos elementos que indican oposición uno al otro. Tal es el caso de los dos elementos discutidos en este trabajo:
Antes de realizar cualquier tipo de comparación o contraste entre los elementos a abordar, es preciso entender la definición concreta de cada uno para tener un concepto más sólido de cada parte. En primera parte Robert Alter en Partial Magic. The Novel as Self-Concious Genre (1975), define la metaficción como: “Una novela autoconsciente […] es aquella que de forma sistemática se jacta de su condición de artificio y que, al hacerlo explora la problemática relación existente entre artificio y realidad” (Orejas, 2003, 38). Así, se puede observar la estrecha relación que juega lo ficticio con lo real en esta primera definición. Un claro ejemplo es la novela The self-Begetting Novel de Steven Kellman (1980) en la que la obra es narrada en primera persona, en la que se ve el desarrolla el personaje principal hasta el punto en el que toma su pluma y es capaz de escribir su propia novela; la novela que estamos leyendo. De este modo se confirma esta como una característica esencial de la metaficción tal como sucede en la obra de C. Martín Gaite.
De acuerdo con Raymond Federman (1981) relación la metaficción con la acción de explorar la ficción en sus mayores posibilidades atribuyendo que el enfoque de esta exploración no es debido a que la metaficción imite la realidad, sino porque más bien demuestra la funcionalidad de la realidad; una realidad quizás ficticia. Es decir, que puede existir una ficción sobre ficción. Se puede dar un ejemplo de ficción desde este ángulo en un diálogo del personaje en acción donde incluya de sí mismo información sobre su propia identidad lingüística identificándola quizás como el autor o incluso el narrador de la obra. Así, el juego entre el realismo, y/o naturalismo puede generar lo que es la metaficción. Pero entonces, qué es el realismo, y el naturalismo?...
Hasta ahora se han mencionado ejemplos suficientes para tener una idea clara de lo que es la ficción y sus derivantes. También se ha dejado por sentado lo que se concibe como real y/o natural son conceptos importantes para saber diferenciar la ficción. En Palabras del maestro Émile Zola quien considera que la realidad está un nivel de mayor importancia a la imaginación ya que ésta última se convierte en fantasía para luego disfrazarse de ficción literaria:
“El realismo no coincide forzosamente con el realismo más clásico ya quedo clarificado por el propio Zola en diversos textos teóricos […] Zola advierte en efecto que, si sacrificamos las fórmulas naturalistas que posibilitan la floración de la novela decimonónica a favor de un concepto tradicionalista del realismo, corremos el riego de negar el progreso y desarrollo de la literatura, cuyo crecimiento cualitativo está siempre condicionado por el trasfondo sociológico, político y moral inserto en el propio ritmo móvil de la Historia. […] Zola clarifica ese historicismo culturalista con el ejemplo de la revolución francesa que, con su dinamitación “ le vieux monde” – constituido por un moral y unas costumbres más que marchitas-. Ha hecho posible la floración del naturalismo” (L’Assommoir, 1877)
Tomando en cuenta la táctica narrativa y crítica narrativa de Emilia Pardo Bazán en su obra Los pazos de Ulloa, las alusiones al naturalismo están enfocadas a un juicio con cierta perspectiva histórica. También, cabe señalar que éste género corresponde a un movimiento literario en su narrativa y estética. “Emilia siguió muy atenta la evolución del movimiento naturalista en las letras europeas y tuvo ocasión de estudiarlo con cierta perspectiva histórica, bien entrada ya la siguiente centuria.” Herrán, José Manuel González. (1989)
Los escritores naturalistas del siglo XIX tenían como propósitos una objetividad narrativa del alcance social como forma para documentar sus relatos. En palabras del teórico por excelencia Zola en la cuestión palpitante” del Naturalismo español (Fimiani, cristiana) se confirma esta característica de los autores naturalistas quienes buscan representar la realidad desde diferentes ángulos y desde su propia perspectiva lo que sucedía a su alrededor:
“…todo lo esencial de esencial del Naturalismo lo teníamos en casa desde tiempos remotos, y antiguos y modernos conocían ya la soberana ley de ajustar las ficciones del arte a la realidad de la Naturaleza del alma, representando cosas y personas, caracteres y lugares como Dios los ha hecho”
Durante el siglo XIX mientras el Romanticismo se trata de una corriente la cual se inspiraba en lo interior del mundo (sentimentalismo, subjetividad, intimismo), el Realismo buscaba proyectar los sucesos externos de la realidad de una manera objetiva a través de la observación y el juicio. La documentación del realismo partía entonces desde el punto de vista del autor. “La época realista en Europa se inicia con la revolución obrera de 1848. A partir de ese momento, los movimientos revolucionarios van adquiriendo cada vez más importancia. Por otra parte la burguesía consolida su poder y deriva hacia posturas cada vez más conservadoras, […] Durante esta época se producen también transformaciones sociales relevantes que cambian la vida de las personas, pero que crean nuevos problemas: crecimiento de la población, concentración en núcleos urbanos, desarrollo de la industria, el comercio, progreso técnico (nuevos inventos: telégrafo, teléfono…etc)” Lissorgues, Yvan (1988). De esta forma, las ansias por reflejar de manera crítica pero sutil y realista se producen obras como Los Pazos de Ulloa en la cual un joven clérigo llega a éste lugar mencionado en el título de la obra en el cual gira en torno la mayor parte de la historia. El realismo se percibe al analizar al marqués el cual es un terrateniente quien hace lo que le place. Éste hombre es un reflejo de la sociedad española de la época. El marqués vive con Sabel, (la hija de capataz) y con quien tiene un hijo. En este corto análisis de la obra se expone un “fuerte” tema pero común en la sociedad de España
Entonces cómo diferenciar el realismo del naturalismo?... Como se puede apreciar en los pazos de Ulloa se percibe una crítica al reflejo de la realidad desde la forma más objetiva posible. Es decir, trata de un choque entre la naturaleza y la civilización al momento de abordar temas de caciques, religión (Julián el personaje principal sobre el cual se desarrollan todos los asuntos, es un clérigo), incluso brujería (escena donde una Sabia lee las cartas para predecir el futuro), y además temas políticos de corrupción (se abordan corrupciones en las elecciones de la obra). No obstante, el espacio en el cual se desarrollan cada una de estas escenas son lugares rurales, hostiles, y simples que asemejan la situación de una sociedad en decadencia. Sin embargo, si comparamos los pazos de Ulloa con la obra de Misericordia de Galdós, es posible apreciar claramente el contraste que diferencia al Naturalismo del Realismo. Mientras Bazán muestra espacios hostiles en los cuales no hay escapatoria por cuestiones de la naturaleza y de la sociedad sólida manejada en la obra, mismo que sigue patrones de una sistema firme real, en cambio en la obra de Galdós a pesar de existe una crítica también, los personajes se muestran entrañables y disculpables; características del realismo.
Por otra parte, de acuerdo a Pardo Bazán en la Cuestión Palpitante (1883) dice que el realismo “comprende y abarca lo natural y lo espiritual, el cuerpo y el alma, y concilia y reduce a una unidad a la oposición del naturalismo y del idealismo racional”. Es decir, Pardo Bazán cree en la idea de utilizar fondos realistas mientras los complementa con situaciones románticos y/o idealistas. Así en el contraste de los personajes ordinarios de las obras se puede apreciar una combinación de ambas tendencias pero con una inclinación a lo real y natural.
Tomando en cuenta las afirmaciones de los autores mencionados en cuestión a la estrecha relación entre lo real/natural con la ficción es imprescindible no apreciar el papel tan importante de los conceptos en juego en la narrativa literaria no sólo del siglo XIX sino que también como influencia en obras recientes. Las obras realistas narrarán los acontecimientos concretos, tratando de aproximarse a una reproducción fiel y exacta de la realidad. En tanto que las obras Naturalistas mantendrán una actitud amoral en la representación objetiva de la vida, es decir las situaciones de los personajes se verán determinadas por fuerzas naturales que la humanidad será incapaz de controlar.
Cabe mencionar que en el juego de estos elementos se pueden involucran y generan otros se ha visto con la metaficción. No obstante es posible hablar de una tendencia y conservarla pero combinarla tal como la técnica narrativa de Emilia Pardo Bazán en algunos de sus pasajes. Mezclar el naturalismo con el idealismo no indica una metaficción pero si tal vez un realismo o naturalismo romántico. En cambio también es posible tener un realismo que no sea tan idealista, ni tan ficticio que se convierta en metaffición pero que se combine con la fantasia sin dejar de ser realismo ni se convierta en ficción. Según Nilsson, Kirsti (2012), en 1955 la confusión de lo qué es “ el realismo mágico” aumentó cuando el uso del término tenía un auge enorme a causa de que Ángel Flores lo identificó con la innovación técnica “cuya mezcla de realidad y fantasía” hace que los objetos cotidianos coquen como fantásticos.” (Camayd-Freixas.1998:2)}
No hay duda que la evolución de lo real maravilloso en la literatura tiene varios ángulos y jugar con lo real, natural, lo ficticio o y la fantasía traen consigo nuevas formas narrativas en la literatura. Conceptos con los que se pueden jugar, combinar o simplemente contrastar. Aun cuando la realidad y la ficción son conceptos que aparentemente pertenecen a campos opuestos en realidad como se mencionó al inicio de este trabajo, éstos dos elementos pueden fácilmente interpenetrarse y confundirse; mezclados o no, la imaginación de la literatura es la que puede anticipar la conexión o vínculo de los elementos. Así el rol de la “Intertextualidad” en la obra de Carmen Martín Gaite juega para ella un papel importante que constantemente se dirige a ella misma.
Según Martinez Fernandez en Realidad y Ficción en la obra de Carmen Martín Gaite (Carrillo Romero, María Coronada, 2009). “El concepto de <la intertextualidad> deriva de la teoría bajtiniana sobre la polifonía y el dialogismo textual, pero apareció como tal neologismo con Julia Kristeva quien atribuyendo a Bajtin el descubrimiento, propone el texto literario interpenetrado de voces o palabras ajenas” (2001:53-66). Así se infiere que la intertextualidad apoyada de la imaginación es una característica esencial para la metaficción la cual puede vincular lo real o natural con la ficción de los asuntos.
Tras la necesidad de retratar la realidad con una visión crítica en vez de huir de ella. Los factores que repercuten en la creación del realismo se encuentran elementos regionales, costumbristas, románticos y aunque generalmente en esta tendencia en particular se frena la imaginación y se limita la fantasía, las fuerzas naturales de las situaciones humanas determinan explosiones del sentimiento que la humanidad no puede controlar. En afirmaciones de Mercedes C. Abengózar en su artículo Significación social de las novelas de Carmen Martín Gaite en cuanto al desarrollo de la conciencia feminista en la España del siglo (2011), expone la importancia de la literatura para Gaite:
“Carmen Martín Gaite ha tenido la creación de una concienciación feminista en España y su crucial aportación en el aún en auge debate sobre lo que es y cómo se ha estructurado el feminismo en España. Carmen Martín Gaite comienza a escribir en los años cincuenta, en un momento en el que la censura y los medios de comunicación estaban en manos del régimen franquista y la literatura suplía de alguna manera la falta forzosa de crítica que había en los medios intelectuales […] Los integrantes de la que se ha dado a llamar <generación de los cincuenta>, escriben comprometidos con la sociedad y la literatura estableciendo una relación dialéctica entre las condiciones sociales en que vivía el país y su proyecto literario individual colectivo.”
Del otro lado tenemos a Emilia Pardo Bazán quien su obra la cual se ha venido discutiendo y analizando en este escrito es una novela original inspirada en apuntes autobiográficos. Las novelas naturalistas tal como la novela de Gaite también refleja las constantes dificultades en las situaciones sociales de la mujer haciendo énfasis en lo indefensas que estaban las mujeres en la sociedad española en esa época, además de manifestar las demandas de la sociedad, sacrificios a los que las mujeres eran expuestas hasta perder la dignidiad (la influencia de primitivo en su hija Sabel), la grandeza que se hacía a la figura masculina y el apego de la mujer a éste como muestra de una sociedad ignorante. “ En España a finales de el siglo XIX, la precaria situación de la mujer atrajo la atención debido a Concha Espina y Emilia Pardo Bazán, quienes anunciaban la falta de educación para la mujer y la existente dualidad atribuida a los hombres y las mujeres evitando que las mujeres se desarrollaran intelectualmente o que ganaran la más mínima independencia de sus su esposos, padres e incluso hermanos” Cristina Ruiz Serrano (2002).
Como se ha visto hasta este punto la repercusión social en la literatura ha tenido una importancia fundamental en los diferentes géneros literarios. El hecho de los sucesos que se llevaban a cabo de las distintas épocas de cada periodo en la literatura ha influido dramáticamente consciente o inconscientemente en éstos en el desarrollo de la narrativa de sus obras.
En un fragmento de Javier López Quintana en su artículo . El movimiento naturalista en España: los autores de la segunda mitad del XIX ante Zola (2007), hace mención de los ambientes y la psicología de los autores, y personajes de sus obras, de cierto modo descubre lacras de la sociedad:
“El influjo del positivismo […] conduce a la formunación de leyes de índole general a través de la experiencia y la observación. En palabras de Comte, se debe alcanzar el estao positivo superando el teológico y el metafísico, profecos previos en el desarrollo de la humanidad […] Zola alude, como pasos que anteceden al Naturalismo, a la evolución del movimiento romántico (del que se cree parcialmente deudor). En este sentido, no olvidemos que las profundas trasformaciones que supuso el avance de la Revolución Industrial se convirtieron en materia novelable.”
En suma, con en el análisis de los conceptos principales de este trabajo se obtienen más complementos que están en contacto con éstos y que además guardan estrecha relación debido a que todos están vinculados por más de un elemento. Se concluye que en base a una sociedad en decadencia marcada con profundas desigualdades sociales es uno de los motivos más fuertes los cuales incitan a los novelistas a documentar lo que sucede a su alrededor despertando su interés. Los novelistas con una perspectiva onmisciente retratan las situaciones, tratando de persuadir la opinión del lector para hacer conciencia en éste. Aunque los conceptos del realismo/naturalismo y metaficción son géneros propios con características singulares e identificables como ya se vió en este escrito con ejemplos, también cabe destacar que en ciertos casos los autores pueden fungir como cronistas pero a veces tienden a desaparecer o perderse en la imaginación al grado de confundir al lector o incluso involucrarlo.
Referencia bibliográfica:
Abengózar, Mercedes Carbayo. "Significación social de las novelas de Carmen Martín Gaite en cuanto al desarrollo de la conciencia feminista en la España del siglo." Literatura y sociedad, el papel de la literatura en el siglo XX:[I Congreso Nacional Literatura y Sociedad]. Universidade da Coruña, 2001.
Ardila, Clemencia. "Metaficción. Revisión histórica del concepto en la crítica literaria colombiana." Estudios de Literatura Colombiana 25 (2011): 35-59.
Bazán, E. P. (1886). Los Pazos de Ulloa: novela original, precedida de unos apuntes autobiográficos (Vol. 1). Daniel Cortezo y Ca. Editores.
Carrillo Romero, María Coronada. "Realidad y ficción en la obra de Carmen Martín Gaite." (2009).
Fimiani, Cristiana. "Emilia Pardo Bazán de cara a “la cuestión palpitante” del Naturalismo español."
Galdós, Benito Pérez. Misericordia. Vol. 36. Ediciones Akal, 2003.
Gil González, Antonio Jesús. "Teoría y crítica de la metaficción en la novela española contemporánea: a propósito de Álvaro Cunqueiro y Gonzalo Torrente Ballester." (2001)
Goyanes, Mariano Baquero. La novela naturalista española: Emilia Pardo Bazán. EDITUM, 1986.
Herrán, José Manuel González. "Emilia Pardo Bazan y el naturalismo." Insula: revista de letras y ciencias humanas 514 (1989): 17-18.
Lissorgues, Yvan. Realismo y naturalismo en España en la segunda mitad del siglo XIX. Anthropos, 1988.
Quintáns, Javier López. "El movimiento naturalista en España: los autores de la segunda mitad del XIX ante Zola." Per Abbat: boletín filológico de actualización académica y didáctica 4 (2007): 33-58.
Nilsson, Kirsti. "El realismo mágico, lo real maravilloso y la novela fantástica." (2012).
Ruiz S, Cristina. “ Women and Society in Emilia Pardo Bazán’s Los pazos de Ulloa and José María de Pereda’s La Montálvez” Crossing Boundaries; an interdisciplinary journal Vol. I, N°3. (2002)





